¿A quién no le gusta una casa ordenada y recogida? A todo el mundo seguramente, aunque hay gente y gustos para todos. Siempre me he preguntado que las personas que son capaces de escribir un diario, un blog o cualquier otro registro de su actividad cotidiana o pensamientos son personas disciplinadas y comprometidas que son capaces de mantener una actividad que puede comenzar siendo una afición para acabar por convertirse en una obligación. Quien me conoce bien sabe de sobra que soy muy desordenado, tengo la mesa del despacho atestá de papeles, pero eso sí en mi desorden yo me aclaro a la perfección. En cuanto a mi propia casa o mi coche, no comment. E incluso en cuanto a la forma de escribir o al hablar, paso de un tema a otro dejando el primero sin concluir. Me encantaría ser de este tipo de esas personas, pero me temo que no es una de mis mayores virtudes. Es por ello que el empezar a escribir este blog ha sido toda una aventura, ya que jamás pensé (pero ni por asomo) que iba ...
¿Reinserción social y reeducación personal? ¿Utopías? ¿Realidades? Reflexiones, vivencias, anhelos, críticas, desesperación, buenos momentos y monumentales cabreos de un trabajador social en una prisión cualquiera...